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Redadas migratorias desatan caos y detenciones en Los Ángeles

Hubo 100 detenidos entre operativos y protestas, con participación de ICE, FBI, DEA y LAPD.

Las redadas migratorias en Los Ángeles provocaron más de 50 detenciones y una ola de protestas ciudadanas. La ofensiva del ICE, apoyada por fuerzas federales, desencadenó escenas de violencia, bloqueos y cuestionamientos al gobierno de Donald Trump. La operación ha reavivado el debate sobre las políticas migratorias en ciudades santuario.

Tensión social tras redadas y fuerte respuesta policial

El viernes, agentes del ICE realizaron operativos simultáneos en zonas clave como el Distrito de la Moda, con apoyo del FBI y la DEA. Se arrestaron al menos 44 migrantes, lo que desató movilizaciones en barrios de mayoría latina.

Videos muestran a manifestantes enfrentándose a oficiales con barricadas y consignas contra el ICE. La ONG ACLU denunció que la Policía local rompió su promesa de proteger a los migrantes.

En total, se reportaron 44 personas detenidas durante los operativos migratorios, mientras que 56 manifestantes fueron arrestados en el marco de las protestas que siguieron. Las acciones estuvieron encabezadas por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), con el respaldo del FBI, la DEA y el Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD).

Conflicto político y legal por la militarización de la ciudad

El despliegue de la Guardia Nacional, ordenado por Trump, fue duramente criticado por el gobernador Gavin Newsom, quien anunció una demanda federal. La alcaldesa Karen Bass calificó la operación como un intento de “sembrar terror” en comunidades vulnerables.

El LAPD declaró el centro de la ciudad como “asamblea ilegal”, justificando así el uso de gases lacrimógenos y arrestos masivos. Además, se reportaron vehículos incendiados, barricadas y agresiones a policías. Desde la Casa Blanca, se insiste en que estas medidas son necesarias para “restablecer el orden” ante las protestas.

La ofensiva migratoria y la militarización de Los Ángeles evidencian una polarización creciente entre autoridades estatales y federales. Mientras los operativos continúan, el debate migratorio se posiciona como uno de los ejes más conflictivos del actual escenario político estadounidense.