La empresa Michelin anunció el cierre definitivo de su planta en Querétaro, tras considerarla obsoleta en términos tecnológicos y económicos. La decisión, que impactará a 480 trabajadores, responde al cambio en la demanda de llantas en el mercado. Michelin reafirmó su compromiso con México pese al cierre.
Obsolescencia y estrategia de mercado
La planta queretana ya no es viable para producir los nuevos tamaños de llantas que exige el mercado actual, especialmente en vehículos de pasajeros y camionetas. La infraestructura no permite una actualización competitiva.
Michelin evaluó diversas opciones antes de tomar esta decisión, calificándola como una de las más difíciles de su historia en México. La planta, inaugurada hace décadas, fue la primera del grupo en el país.
Este cierre marca una etapa de transformación para enfocarse en instalaciones más modernas como la de León, Guanajuato.
Datos clave:
- Se producían menos de 500,000 llantas BFGoodrich al año.
- También operaba un taller de bandas de renovado para camión.
- El cierre será gradual hasta finales de 2025.
Apoyo a trabajadores y continuidad en México
Michelin implementará un plan de apoyo individual para los 480 empleados afectados. Este incluye indemnizaciones, asesoría laboral y programas de capacitación para mejorar su empleabilidad.
Además, coordinará acciones con autoridades locales para mitigar el impacto social y económico del cierre. Se creará un fondo para actividades sostenibles en beneficio de la comunidad queretana.
La empresa mantendrá su sede en Querétaro y seguirá operando su planta en León, considerada una de las más avanzadas de la región. Esta unidad atenderá nuevos segmentos como minería y agricultura.
La decisión busca fortalecer la competitividad de Michelin en Norteamérica ante los desafíos del sector automotriz.
