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Museo del Louvre cambia para 2031: ¿qué pasará con la Mona Lisa?

El gobierno francés moderniza el Louvre: La Mona Lisa tendrá sala exclusiva y acceso independiente en 2031, con nuevo diseño y tarifas diferenciadas.

Macron lidera la mayor transformación del Louvre en décadas

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha anunciado una ambiciosa renovación del Museo del Louvre que culminará en 2031. Entre las medidas centrales destaca el traslado de la icónica Mona Lisa a una sala exclusiva, con entrada separada y costo adicional.

Museo Louvre cambia 2031 Mona Lisa

El proyecto, denominado “Nuevo Renacimiento”, responde a los crecientes desafíos de infraestructura del museo más visitado del mundo. Según datos oficiales, el 75% de los 30,000 visitantes diarios acuden solo para ver la obra de Da Vinci, lo que ha generado saturación en la actual Salle des États, dificultando la experiencia y el acceso a otras piezas de valor.

Nueva entrada, experiencia mejorada y tarifas por categoría

El plan incluye una nueva entrada cerca del río Sena, que reemplazará a la icónica Pirámide de Cristal, inaugurada en 1989. Esta segunda puerta conectará con espacios subterráneos bajo el Cour Carrée, permitiendo una circulación más eficiente.

Otras mejoras contempladas:

  • Modernización de baños, áreas de descanso y servicios gastronómicos
  • Áreas verdes urbanas en la explanada exterior
  • Tarifas diferenciadas: más costosas para turistas fuera de la Unión Europea
  • Costo adicional para visitar La Gioconda, cuyo nuevo recinto será independiente del recorrido general

El proyecto está valorado entre 100 y 500 millones de euros y será financiado mediante mecenazgo, publicidad y los ingresos por entradas, sin afectar el presupuesto estatal.

Entre legado cultural y eficiencia institucional

La reforma no solo moderniza una institución histórica, también busca redefinir el equilibrio entre accesibilidad cultural y sostenibilidad operativa. Para Macron, representa además una apuesta por fortalecer su legado presidencial, como lo hizo con la restauración de Notre-Dame.

Retirar a la Mona Lisa de su actual ubicación permitirá mejorar la exhibición de otras obras y recuperar la misión educativa del museo, que ha sido opacada por las multitudes que solo buscan una selfie frente al retrato más famoso del mundo.